Aprendiendo a superar la tristeza
Desafortunadamente, muchas veces la pérdida de un animal de compañía no se reconoce como importante por nuestro entorno, familia, amigos o compañeros de trabajo.
Es muy importante tener la oportunidad de estar triste y poderlo manifestar a la familia y amigos de confianza. No nos tenemos que avergonzar de sentir dolor y de llorar por un ser que nos ha acompañado tanto tiempo.
Normalmente en situaciones de pérdidas traumáticas o repentinas, suele aflorar un sentimiento de culpabilidad, ya que no entendemos cómo ha podido pasar. Al haber sido los responsables de su bienestar es normal que este sentimiento nos remueva por dentro, pero no lleva a ningún sitio buscar culpables.
Tenemos que esforzarnos a intentar recordar los momentos buenos y agradables. Con el tiempo estos pensamientos ganarán terreno y se quedarán por siempre dejando paso a la calma que produce la memoria tranquila de nuestro animal querido.